sábado, marzo 20, 2010

¡ Y Viiva Espaaañaaa... !

Ahora, con vuestro permiso y contando con vuestra benevolencia y comprensión, me voy a cagar en todos los santos, con perdón...

Viendo el muy noble e hidalgo castellano señor Zapatero que le peligran los votos cautivos y normalmente asegurados de Andalucía, gracias a los cuales manda en toda la puta España, se ha ido a darse un garbeo por aquellas Tierras de María Santísima y les ha llenado de dineros a manos llenas.

Les ha pagado unas supuestas "deudas históricas" que ni Dios sabe de donde proceden, reparte ayudas y subvenciones y ¡oh, recochineo supremo! pone todavía mas fácil el cobro de las "peonadas".

Esto de las peonadas es un invento de los gobiernos españoles para, con parte del dinero que nos roban a los catalanes, pagar a los andaluces de pueblo sin que tengan que dar un palo al agua, para que vivan sin dar golpe ni tener que emigrar, que es lo que deberían hacer si la puta economía de su puto rincón de país, mal repartida en manos de cuatro marqueses y sinvergüenzas, es verdad que no da para más.

Ahora, con que justifiquen haber cotizado 20 días (veinte putos días solamente) ya cobran todo el puto año entero y como que estas ayudas pueden solicitarlas todos los componentes de una misma familia, sin ser gran cosa, pueden reunir una buena pasta y vivir de renta.

Alguna vez ya expliqué que un conocido mío, andaluz, empresario y propietario de un cortijo con bodega de vino de Jerez y donde cada mañana iba a darse un paseo a lomos de su yegua, le preguntaba, extrañado, a un amigo mío, empresario catalán y propietario de una industria metalúrgica con mil obreros por los que cotizaba todo el año (y dichos obreros también pagaban su parte), si él pagaba a su servicio doméstico. Por que él presumía que al matrimonio que tenía en el cortijo, que ella le llevaba la casa y el marido las tierras, la bodega y le cuidaba el caballo, no les pagaba nada. Una vez al año les firmaba el certificado de las "peonadas" por las que estaban dados de alta (y cuyas cotizaciones se pagaban ellos mismos) y todo el año cobraban sus mensualidades de la Junta de Andalucía. Con tu dinero y el mio, de nuestros impuestos que cada año nos descuentan religiosamente desde el puto Madrid.

¿Entiendes ahora, imbécil, por qué quiero ser independiente de esa puta llamada España? (*)

Coronel Von Rohaut

(*) Entre muchas otras razones. Una de ellas, es la misma por la que los portugueses no quieren ser españoles, los franceses no quieren ser alemanes ni los holandeses no quieren ser belgas. O muchos escoceses, como los irlandeses, no desean que les digan ingleses, ni los kurdos irakíes o los armenios turcos. Y los noruegos (cuatro gatos, menos que catalanes), separados de Suecia desde principios del 1900 (o sea, hace cuatro días) y a pesar que ambos países, los dos, son ricos y sus lenguas emparentadas, independientes y soberanos están más satisfechos que la hostia.

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