sábado, diciembre 25, 2010

Viene de lejos

Vienen de lejos las hostias y vienen de lejos las reivindicaciones, ya que en este puto mundo, pocas cosas nuevas hay bajo el sol, salvo la electrónica.

Y no por ser hoy Navidad voy a cesar en mi afán de pregonar los agravios de Catalunya.

En este mapa político de la España de 1850, ya se clasificaba Catalunya y todo el antiguo Reino de Aragón (el Principado Catalán, País Valenciano, Aragón y las Baleares) como tierras "asimiladas".

Porqué los "fueros" ya nos habían sido suprimidos, arrebatados por la fuerza de las armas, en 1714/1715, y nunca habíamos sido socios de Castilla a parte entera. Hemos sido, desde que perdimos nuestra independencia, "tierra de conquista".

Y de "pillaje" tributario/fiscal, añado yo... así como de intento de aniquilamiento cultural, mientras no recuperemos nuestra soberanía nacional. Laminada desde que Fernando caso-se con Isabel (si bien todo empezó cuando el malvado Vicente Ferrer maniobró para que accediera al trono de Aragón un Trastámara, rama bastarda de la Casa de Castilla, y desapareciera la Casa de Barcelona) y los castellanos nos fueron metiendo mano; sibilinamente primero, a saco después...

Coronel Von Rohaut

2 comentarios:

interbar dijo...

El mapa parece de la época de la constitutución de las provincias cuando Javier de Burgos regaló a Cataluña el Valle de Aran. Es innumerable las veces que nombran a España los grandes reyes aragoneses como Jaime I el conquistador. De hecho el apellido Español solo existe en Aragón y Cataluña siendo la forma en que eran nombrados los catalano- aragoneses en el sur de Francia.
Los fueros se eliminaron primero en Castilla tras las guerras de las comunidades y su eliminación en Cataluña supuso el punto de despegue de la economía industrial. Le recomiendo, mi coronel, que lea el bando de los defensores de Barcelona, el bando de Villarroel, para ver cuantas veces se nombra ahí a España.

Coronel Von Rohaut dijo...

Yo, a España, también la nombro muy a menudo. Y no precisamente de forma elogiosa...
¡ Pero en fín !