viernes, abril 13, 2012

"Los coros de Clavé" y su ejemplo perdido

A mediados del siglo XIX y en plena Revolución Industrial y con el fín de acercar la cultura a las masas obreras de Catalunya y, de forma especial, darles un objetivo lúdico que les apartara de las tabernas, tugurios y el consumo de alcohol en el que ahogaban una vida dura de trabajo laboral, sin fiestas ni descansos, el músico, político y animador cultural, Anselmo Clavé (posiblemente francmasón), fundó los Coros de su nombre en los que reunía a obreros y menestrales y que se expandieron por todo el país.

Era una época, que duró hasta la Guerra Civil de 1936/39, en la que los obreros y clases bajas buscaban mejorar, salir de su indigencia y marginación, mediante el estudio y la adquisición de alfabetización y cultura que les proporcionaban los movimientos asociativos, los casinos y sociedades, bien de la Iglesia o civiles como los Coros de Clavé, bien políticos como los cursillos que impartían partidos de izquierdas como los comunistas y, sobre todo en este apartado de mejora personal, los anarquistas.

Viene a cuento todo esto porqué, en relación al desmoronamiento de la actual sociedad que he tratado en el "post" anterior, también es importante que mientras antes eran los obreros los que buscaban ascender mediante su culturización, ahora se impone la relajación, tanto moral como en la cultura del esfuerzo, y no solo muchos inmigrantes y componentes de las clases más bajas prefieren holgar y delinquir, si no que hasta los hijos de las otrora clases medias y esforzadas prefieren abandonarse y profundizar, agrandar, la falta de valores y de objetivos en la vida. El ascensor social, añadido a la crisis económica, se ha parado y está a punto de despeñarse por el hueco de la escalera.

Quizás me paso de pesimista pero es que... ¡cuanto lo siento...!

Coronel Von Rohaut

(PS) En una época en la que también, obviamente, existía la música ligera, la de los cafés-cantantes y de los bailes de los chiringuitos, mi padre y muchos de sus compañeros, obreros manuales en una fabrica textil, eran grandes amantes de la ópera. ¿Cuántos seguidores de Mozart o de Verdi encontraríamos ahora mismo en Bellvitge o en Santa Coloma de Gramenet, en Carabanchel y Vallecas, o en San Pablo de Sevilla? Y ya no he puesto los barrios marginales en los que lo que se hace no es ni vivir...

1 comentario:

general rogelius dijo...

Querido coronel: Antes de que entrara en vigor la partitocracia ó
democracia inorgánica, existia una relación causa efecto. Es decir, el
empleado, obrero, etc. trabajaba durante el dia y estudiaba por la noche y se sacaba una carrera.
Despues, encontraba trabajo de inmediato en mejores condiciones.
Ahora no modifica su condición. Más
ilustrado, eso sí. Entonces ¿para que?
Grneral Rogelius