domingo, noviembre 15, 2015

El relativismo

Yo siempre digo que solo hay dos formas de hacer las cosas, la buena y la mala (y que generalmente la buena es la que digo yo). Hay que hacerse responsable de lo que se dice y rogar a Dios que no deje que la cagues.

"L'audace, l'audace, toujours l'audace" (*)
Alguien muy allegado me responde que soy un radical y que aparte de la forma o vía que yo propongo, hay o pueden haber otras muchas igual de correctas o válidas y que debería aceptarlas, ni que fuera por principio.

Pero este relativismo filosófico (que no humildad intelectual), que igual puede dar una cosa que otra o que tanto monta monta tanto, es lo que tanto daño está haciendo a nuestra sociedad actual. Es necesario tener verdades absolutas en las que apoyarse y atreverse a decirlas.

Ya sé que las personas que ponen algo en cuestión y encuentran otras posibilidades o alternativas son las que han hecho avanzar a nuestra civilización; pero cuando crees tener una verdad absoluta tienes que defenderla hasta el final o hasta que te aparezca otra verdad absoluta tan o más valida y evolucionada que la anterior, en la que puedas creer. Ya que la sociedad, la humanidad, también precisa momentos o tiempos de pausa y estabilidad; cuando Albert Einstein, despues de mucha búsqueda, presentó su "fórmula de la relatividad" (precisamente), no permitió que nadie se la modificara ni rechazara, porqué tenía razón (**), hasta que alguien demuestre lo contrario.

Y claro que tienen que seguir habiendo personas que pongan algo en duda o en cuestión para seguir avanzando, pero el que lo pone todo en cuestión permanentemente, todo y siempre, es un tarambana.

Coronel Von Rohaut

(*) Frase del revolucionario francés, republicano radical Georges Danton (en la imagen inferior; el de la imagen superior es el filosofo y matemático René Descartes) que, equivocadamente y en una conversación, el general americano George S. Patton se la atribuyó a su admirado Federico II el Grande de Prusia.
Y lo que dijo Napoléon (pero en Rusia se equivocó y también le falló, una vez, a Patton), fue "Avancer toujours, l'intendance suivra".

(**) Como cuando dijo que solo habían dos cosas infinitas, el universo y la estupidez humana, pero que de la primera no estaba muy seguro. 

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