Durante la Segunda Guerra Mundial, los soldados americanos, los G.I.'s, infantes o "privates" con su gorro cuartelero, marineros con su traje blanco de pantalones anchos y su gorrito ladeado, "marines" y aviadores, en sus permisos y ratos de ocio, seguramente para olvidarse que su vida pendía de un hilo y había que disfrutarla a grandes tragos, se pasearon por todo el mundo bailando desenfrenadamente al ritmo vivaz de la música swing y del boogie-woogie. Música que difundieron y popularizaron, pasando a ser la seña de identidad de la juventud de post-guerra.
El swing comercial incluso pasó a ser música de desfile, interpretada por las bandas militares y Glenn Miller, con el grado de Mayor, dirigió una de ellas y popularizó "In the Mood" (En forma). El "Boogie-Woogie" era, cómo baile, más saltarín y acrobático y descendía de un estilo de música para piano que apoyaba el trabajo de la mano izquierda y provinente o simultáneo, a su vez, del "ragtime", un estilo musical negro anterior al "jazz" propiamente dicho.
Pero músicos de "jazz" de aquella época, finalizando o ya finalizada la guerra y aún tocando en orquestas serias de "swing", se encontraban encorsetados y limitados por los arreglos de las piezas que interpretaban y veian coartada su creatividad.
Especialmente en New York, muchos de ellos, terminado su trabajo estable, se reunían en bares, tugurios o "cavas" de la calle 52 y montaban lo que se llamó "jam sessions", largas sesiones nocturnas que se alargaban hasta la madrugada, rodeados de nubes de humo y vapores de alcohol y en las que improvisaban por turnos, sobre piezas conocidas y para su propio deleite y experimentación o busca de nuevas armonías.
Ya en la prehistoria del "jazz" muchos músicos se habían alcoholizado, por buscar nuevas sensaciones o debido al ambiente en que se movían, y algunos habían caído en la drogadicción. Pero luego esto estuvo mas generalizado, cómo mas tarde los escritores de la generación "beat" que experimentaron con drogas alucinógenas cómo el moderno "LSD". Y algunos, si bien contados grandes musicos de "jazz", cayeron en la heroína. Uno de mis discos preferidos es la balada "Lover Man", que Charlie Parker grabó en varias versiones; la que yo tenía, no la mejor pero si más emotiva, era la que grabó en California pocos días antes de ser ingresado para una desintoxicación, mientras dos compañeros le sostenian por debajo de los brazos. Esta escena podía verse en la película biográfica que dirigió Clint Eastwood, gran amante del "jazz", "Bird".
Pero de aquellas sesiones de experimentación a mediados de los cuarenta, lideradas por el saxo alto Charlie "Bird" Parker y el trompeta Dizzy Gillespie, salió el nuevo estilo de "jazz" moderno: el "be bop".
Este estilo recuperaba del "jazz" clásico su formato en grupos más pequeños o "combos", especialmente cuartetos, así cómo su base en la improvisación y variaciones solistas sobre temas, originales o conocidos, mantenidos por la sección ritmica y con pequeños intermedios corales, en forma de "riff". Pero se diferenciaba claramente al renunciar al fraseo vocal del antiguo "Hot jazz", inspirado en la imitación de la voz humana y que todavía se había mantenido en algunas orquestas "swing", particularmente en la de "Duke" Ellington y sus metales con sordina y efectos "wa-wa" en trompetas y trombones.
Pero la revolución la harían las secciones ritmicas, lideradas por los baterias o "drummers" cómo Max Roach, Art Blakey y Kenny Clarke y los contrabajistas Ray Brown, Percy Heath y Charles Mingus. Estos instrumentos dejaban de marcar tan sólo el ritmo y el "tempo", cómo en el pasado e incluso dejaban de hacer puntuales y espectaculares "solos" de batería, cómo ya hacían Gene Krupa y otros en la era del "swing", para pasar a tocar soportes melódicos más elaborados y "solos" mucho mas sofisticados.
Y los "solos" de los metales eran endiabladamente rápidos, formados por corcheas y semicorcheas, lo que requería un verdadero virtuosismo en la técnica instrumental. No olvidemos que en esta época los musicos ya tenian todos formación academica. El trompeta Miles Davis y el pianista John Lewis, que se inciaron en esta época y tocando en los conjuntos de Parker o de Gillespie junto con los citados baterias y bajistas, se habían graduado en la "Juillard School of Music" que era (y es) el Conservatorio de Nueva York. Me hizo mucha gracia descubrir, paseando, su pequeña puerta de entrada en el "Lincoln Center", en un lateral frente al Metropolitan Opera House. Igual que, cerca de allí y en la calle detrás del "Plaza Hotel", la tienda de pianos de cola mas famosos del mundo, la "Steinway & Sons", que usaban en sus conciertos los grandes pianistas de "jazz" (y clásicos, por cierto...)
También se introdujeron en algunos temas de "be bop" o ya "bop" a secas, como se le conoció, ritmos y frases caribeñas, sobre todo en las grabaciones de Dizzy Gillespie, que incorporaba a solistas de "bongos" cubanos, cómo Chano Pozo. Gillespie inauguró con ello el "afro-cuban jazz".
Otros pioneros del "bop" y que tocaron con los maestros, son el pianista Thelonius Monk, el trompeta prematuramente fallecido y considerado el heredero de Miles Davis, Clifford Brown, el saxo tenor Dexter Gordon y John Coltrane que también tocaba el saxo soprano, etc.
Gordon residió posteriormente muchos años en Europa, especialmente en París, dónde, cómo otros músicos afro-americanos, se sentía menos discriminado. Y allí, dirigido por Bertrand Tavernier, rodó uno de los mejores films sobre "jazz", parcialmente autobiográfico, titulado "Round Midnight", que es uno de los grandes temas de Miles Davis y Thelonius Monk.
Y el "bop" tuvo, a su vez, derivados y sucesores. También lo veremos, mientras la memoria aguante.
Coronel Von Rohaut
No hay comentarios:
Publicar un comentario