Un buen amigo mío, con largas estancias en mi ciudad preferida, New York (junto con París, "of course"), me dice que ha asistido a un macro concierto, en el Madison Square Garden, de Neil Diamond.
Me explica, por e.mail, que cantó las míticas "Sweet Caroline", "September Morn", "Song, Sung Blue", así cómo "America" con el público puesto en pié. Público mayoritariamente "senior", de acuerdo con la edad del intérprete, cuyos mayores éxitos tuvieron lugar en los 60's y 70's.
Y este mismo día, veo que ha actuado en el Festival de Cap Roig, de Calella de Palafrugell, mi lugar habitual de veraneo, el Julio Iglesias. Nunca llegaré a entender cómo la estúpida burguesía catalana, la que llena los espectáculos de éste carísimo Festival, puede darle cancha a este carcamal del "show business" español y carpetovetónico, seguidor confeso del Real Madrid, pero que vive desde hace décadas allende las fronteras (nacionalista español cínico...) y que, a pesar de su ahora ya obsoleto éxito internacional debido aun buen marketing, cómo artista ha sido siempre un verdadero excremento. (¡ Hombre, pero no tanto cómo el Raphael, eh...!).
Coronel Von Rohaut
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