Hasta muy recientemente, no ya en los USA pero sí en Europa y sobre todo en España, los ejércitos eran tanto para defenderse de ataques exteriores, sobre todo de países vecinos, cómo del llamado "enemigo interior" (adversarios políticos o revolucionarios, territorios poco o mal dominados, ciudadanos levantiscos, etc.) o sencillamente sojuzgar a la población propia. Y los había en casi todas las ciudades.
A este respeto muchos recordarán que sólo en la ciudad de Barcelona habían cañones que nos amenazaban desde Montjuic, cuarteles del Bruc (el único existente hoy y casi deshabitado), de Lepanto, de San Agustín, de la calle Tarragona y de Sant Boi. Y baterías en Badalona, acuartelamientos en Manresa, Berga, La Seu d'Urgell, Figueres, etc., aparte de Tarragona, Girona y Lleida.
Algo parecido pasaba en Francia y ahora, por reducciones de presupuesto y por modernización y reestructuración, se están trasladando o clausurando muchas bases y cuarteles esparcidos por todo el país.
A este respeto, ayer decía Sarkozy: "Habían regimientos franceses encargados de asegurar que no fuéramos invadidos por los italianos..." y riendo añadió, "no queríamos al ejercito italiano y ahora tenemos a la Carla..., lo que es más agradable, al menos para mí".
Pero coñas aparte, al estudiar cuales de los regimientos dedicados a protegerse de Italia se iban a trasladar o disolver, sólo aparecen dos y que no están en los Alpes por ninguna amenaza italiana si no porqué son tropas de montaña que precisan un cierto adiestramiento específico. Los italianos ya no son ninguna amenaza desde el año 1945.
Coronel Von Rohaut
No hay comentarios:
Publicar un comentario