Artur Mas, a bombo y platillo, inaugura una serie de conferencias políticas sobre la salida de la crisis y la política catalana.
Este señor, que a su proyecto le llama "La Casa Gran del Catalanisme", con la idea de aglutinar todas las fuerzas nacionalistas y que, a veces, hasta deja entrever un difuminado toque soberanista (algo que ni Pujol había hecho jamás), al final enseña el autentico plumero.
Dice que si el Tribunal Constitucional arrasa con las cuatro tonterías que le quedaban de "nacionalista" al nuevo Estatut (lo que todo el mundo sabe que será así) y si el Gobierno acaba dándonos una financiación autonómica que también todos sabemos que no llegará a ser ni una puta mierda de limosna, porqué es cómo siempre ha sido y siempre será bajo el dominio español, los catalanes hemos de responder, unanimamente, con "levantarse no en armas, si no con trabajo".
O sea, en román paladino, "bajarse los pantalones", también cómo siempre.
¡ Molt bé senyor Arturu ! ... Y algunos descerebrados o lame culos dicen que el Mas hizo un discurso vibrante, brillante y de gran estadista...
De gran traidor, de cobarde "posibilista" vendido al catalanismo encajista de la banca y alta burguesía. Sometido al colonialismo español, diría yo...
Coronel Von Rohaut
No hay comentarios:
Publicar un comentario