Pero si desearía hacer algunos comentarios un poco laterales:
- Gordon Brown y no Sarkozy (que es un poco más fantasma y lo había adelantado como un deseo personal y para ello había promovido personalmente dicha reunión, que tuvo su preparación en Washington, todavía bajo Bush), ha declarado que estamos al principio de un nuevo orden económico mundial.
- Por mi edad no pude vivir los acuerdos de Bretton Woods (New Hampshire, USA), al final de la Segunda Guerra Mundial, donde se forjaron, tras dos años de discusiones, las nuevas normas económicas mundiales (básicamente, el fin del monopolio del patrón oro y la adopción del dólar USA como moneda universal de intercambio, la creación del FMI, etc.) que han regido al mundo hasta hoy.
- Soy, por lo tanto, consciente que estos días hemos estado viviendo unos hechos históricos y lo he vivido intensamente, siguiendo al momento y a través de distintos canales extranjeros, todas las situaciones e intervenciones.
- He leído hoy, estupefacto, en el sectario periódico madrileño El País, que Zapatero estaba llamado a mediar entre las posiciones enfrentadas del frente anglo-sajón (Obama y Brown) y del frente europeo (Merkel y Sarkozy). Finalmente, todos los analistas coinciden en que ha sido un éxito de Gordon Brown, que ha sabido aunar todas las posiciones y absolutamente nadie ha hablado del pobre Zapatero, que gracias que lo hayan dejado sentarse.
- En el comunicado final se insiste, como querían los anglo-sajones, en evitar todo tipo de proteccionismo y de activar los mecanismos financieros de relanzamiento de la economía, que comportan mayor inyección monetaria y, por lo tanto, mayor deuda y déficit. Pero se acepta que sean USA y China (que dispone de las mayores reservas) quienes hagan el mayor esfuerzo mientras que se da por bueno lo que ya hayan hecho hasta el día de hoy los europeos, que se comprometen a hacer algo más si así lo precisa la marcha futura de la economía.
- Y se han puesto todos de acuerdo, puesto que Obama lo ve muy bien y no solo Merkel y Sarkozy, que se impongan nuevas regulaciones que frenen el capitalismo salvaje y desregulado de estos ultimo años.
- Se pondrán limites a los emolumentos, sueldos, primas y bonus y otros beneficios salariales de grandes dirigentes siempre que los mismos no respondan a resultados positivos de su gestión, y de los "traders" ya que estos últimos tienen indexados sus ingresos en los resultados a muy corto plazo, lo que hace que estos negociantes globales de dinero (funcionarios de grandes bancos, corporaciones financieras o "tiburones" del capitalismo) se lancen a operaciones imprudentes, especulativas y negativas para la economía a medio y largo plazo.
- Se pone fin, definitivamente, a los "paraísos fiscales" y banca "off shore". Hoy mismo se publicarán tres listas: una blanca, de países fiscalmente transparentes; otra negra, de países que no cedan al requerimiento de información abierta y en los que se refugian ingentes masas de capital opaco, "hedge funds" y otros instrumentos financieros que esconden capitales de origen desconocido, no siempre legales y que escapan al sistema tributario de sus países de origen y, en definitiva, del sistema financiero internacional; y una lista gris, de países que ya han ofrecido abrir sus sistemas y levantar, ni que sea en parte, el secreto bancario: si lo hacen en breve, pasarán a la lista blanca y si no lo acaban de hacer, pasarán a la lista negra.
- Cómo que la publicación de estas tres listas, realizadas por la OCDE, organización más neutral que el propio G-20 y en la que participan algunos países distintos, no sería efectiva sin sanciones para la lista negra, en la próxima reunión del G-20 y que ya se ha formalizado para el próximo mes de Septiembre, en New York y a continuación de la reunión del FMI y de la Asamblea General de la ONU, se proclamarán dichas sanciones que se estudiarán, técnicamente, hasta entonces.
Claro que ya lo iremos viendo...
Coronel Von Rohaut
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