Como un paso más en la evolución de la técnica terrorista del puto "moro" suicida, ahora en Afghanistan, y practicado por la guerrilla "talibán", se está utilizando un pobre burro al que, cargado con kilos de explosivos, lo lanzan contra los camiones militares o, atado al borde de un camino, lo hacen explotar al paso de un convoy.
A mi no me importa, salvado el daño que causa a inocentes, que un imbécil se cargue de cartuchos de dinamita alrededor del pecho y se auto-inmole, haciéndose explotar con la creencia que irá al cielo, donde le aguardan 80 vírgenes. Con el agravante que las vírgenes no van a estar esperándolo y, si así fuere, no le servirían de nada ya que, al explotar, también le habrían volado los huevos...
Pero no les perdono que sacrifiquen a un pobre burro, que no lo ha solicitado ni tiene ninguna culpa de la maldad de los hombres. Y siempre, repito, siempre me merecerá más compasión y me dolerá más la muerte de un pobre asno que la de un puto islamista fanático y cabrón.
¿Qué quieres que le haga...?
Coronel Von Rohaut
(+) En la foto, el burro catalán: un amigo.
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