El chorizo catalán

Hubiera deseado pasar de puntillas sobre el caso Félix Millet, por la vergüenza y sonrojo que me causa.

Yo que siempre había dicho que era mejor votar, para puestos públicos, a personas que ya fueran ricas y acomodadas, al suponer que no tendrían tantas ansias de robar como algunos desharrapados y arribistas hambrientos de la izquierda, "putos sociatas" incluidos ansiosos de revancha, ahora me la tengo que envainar. Sí señor, la cagué.

Por culpa de este prohombre de la culta y limpia burguesía catalana, modelo de la sociedad civil barcelonesa, que ahora resulta que no solo se había auto-asignado un sueldo fastuoso si no que, negándoles hasta un bocadillo a los componentes del coro, que actuaban desinteresadamente y que son el alma del "Orfeó Catalá", se estaba construyendo lujosas piscinas y hacía maravillosos viajes de vacaciones con su familia, a cargo de los dineros de la institución cultural y emblemática que presidía. ¡ Qué cabrón e hijoputa !

Y leo que ultimamente se había acercado a las posiciones del PP e intimado con su mascarón de proa, el Aznar ("Ansar" para los amigos).

No, si es que Dios los cría y ellos se juntan...

¿Que aprovecho que el Pisuerga pasa por Valladolid, que no soy imparcial si no sectario y partidista, aprovechando cualquier excusa para hacer demagogia?

Sí, ¿Y ?

Coronel Von Rohaut