Cuando los benditos y puritanos colonos de la Nueva Inglaterra y resto de habitantes de "Las trece colonias" o posesiones inglesas en la coste este de Norteamérica, hartos que la potencia colonial, el Imperio Británico, les aumentara los impuestos y, a cambio, no les diera un buen servicio (*), decidieron prescindir del dominio de sus amos de Londres y dotarse de un estado soberano, propio e independiente.
Y declararon la "Guerra de la Independencia" (1775-1783).
Cuando años más tarde, los habitantes, blancos y elitistas, del Sur de los Estados Unidos, agrícola y esclavista, se opusieron a las leyes modernas que les quería fijar el Norte industrial, más rico y mayoritario, se quisieron separar (**).
Y declararon la "Guerra de Secesión" (1861-1865).
Luego yo mismo, y equivocadamente, utilizo indistintamente las palabras separatismo, secesión o catalanismo (***), para reflejar mis deseos o posicionamiento frente a la colonialista, imperialista, centralista y retrógrada España de matriz Castellana. Y es un error.
La única posición de Catalunya frente a la invasora en su día y ocupante ahora, castradora y expoliadora España, ha de ser la de "Independencia".
Mira tu si es sencillo...
Coronel Von Rohaut
(*) ¿A qué leches me recordará a mi esta vaina?
(**) Aquí se introduce una variante; el Norte industrial y moderno que en España somos nosotros, los catalanes, no somos mayoría. Y ojalá el Sur quisiera separarse, hostiputa, pero no caerá esta breva. Con lo que chupan de nosotros... ¿cómo van a querer separarse esos malditos canallas?
(***) Yo no soy catalanista; yo soy catalán y, por lo tanto, lo de catalanista cae por su peso o, como dicen los franceses, "ça va de soi". Porqué el catalán que dice ser también español, o es un pobre indocumentado, un analfabeto, un equivocado quizás incluso de buen fe, o un traidor de tomo y lomo.
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