Hace años un Ministro español, achuchado por el Pujol cuyos votos de CIU necesitaba el gobierno de Madrid, estuvo a punto de traspasarnos la gestión del aeropuerto del Prat (*). Los altos funcionarios (**), los altos cargos fijos del ministerio, lo impidieron con sus tretas, bloqueos y artimañas. Y cuando la idea se archivó, en el Ministerio de Fomento se descorcharon botellas de "champagne" (***) para celebrarlo: el mando y el chollo se quedaban en Madrid, en sus manos castellano-centralistas.
Tiempos después y siendo Ministro de Industria el "sociata" Montilla y con ganas de demostrar su titubeante catalanidad, decidió trasladar a Barcelona la sede de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones. Lo consiguió después de muchos tiras y aflojas ya que sus funcionarios madrileños se opusieron (incluso yendo a los Tribunales) a la deslocalización a Barcelona con todas sus fuerzas y aportando toda clase de excusas, dificultades y falsas razones. Y la mayoría prefirieron cambiar de organismo o de trabajo (sin salir de la administración, claro...) antes que desplazarse a lo que ellos debían considerar que era tierra hostil, el enemigo o, en palabras y en otro contexto, de la "pepera" Esperanza Aguirre, "fuera del territorio nacional".
Ahora y al muy poco de volver al poder el PP, con un decreto y sin ninguna alharaca, el Ministro Soria disuelve la Comisión, subsumida en otro Organismo mayor y con sede, naturalmente y faltaría más, en el Madrid de toda la vida.
Y en un suspiro y con la excusa de reducir costes debido a la crisis (****), vuelve al centro la primera y única sede de un Ente nacional español que alguien había osado descentralizar (*****). Con una visión "federal" de la que, en Madrid, todo el mundo abomina y todos rechazan, por más que se empeñen los incautos o gilipollas del PSC.
Claro que no ha de extrañar en nada que esto ocurra, de la misma forma que vuelven a amenazar con el Plan Hidrológico Nacional que se lleva al centro la gestión de todas las cuencas de los ríos hispanos y así poder trasvasar hacía el sur la poca agua que le pueda quedar al Ebro a su llegada a tierras catalanas. Que vuelvan a poner sobre la mesa el Corredor o Eje Ferroviario Central, por Madrid y Zaragoza y perforando los Pirineos, lo que ya fué rechazado por la Comisión Europea una vez, por faraónico y caro (pero todo sea poner palos en las ruedas del Eje Mediterráneo por Valencia y Barcelona). Que sigan oponiéndose con gran bravura y ferocidad a la privatización y/o traspaso de la gestión del Prat, etc.
Lo que me extraña, pero a estas alturas ya no debería, es que sea con estos energúmenos, con estos salteadores de caminos centralistas, con estos jefes mafiosos de la española Cueva de Alí Babá, con los que el Artur Mas quiera entenderse, con los que los de CIU crean (¿se lo creen de verdad?) que pueden conseguir un pacto fiscal, ningún acuerdo económico-financiero que no sea dejarnos robar impunemente, bajarnos los pantalones hasta los tobillos y dejarnos encular sin vaselina y encima escupiéndonos en la nuca.
¿ Y si nos independizáramos de una puta vez... ?
Coronel Von Rohaut
(*) De traspasarnos a nosotros la dirección del aeropuerto que, en principio, debería ser nuestro y para nosotros y no para aprovecharnos si no para dinamizarlo, mejorarlo y convertirlo en una palanca para nuestra economía como, hasta ahora, hace con Madrid/España el de Barajas.
(**) Los altos funcionarios de carrera del estado o altos cargos de los ministerios que no son elegidos ni cambian con cada alternancia de gobierno, son una élite funcionarial mucho más centralista que los propios gobernantes y los que realmente detentan el poder, en muchos casos.
(***) Auténtico.
(****) ¡Oh crisis! Cuantas barbaridades, putadas y salvajadas se cometerán en tu nombre y aprovechando tu excusa...
(*****) En Alemania, el Deutsche Bundesbank, que es el banco central nacional alemán o federal (no confundir con el Deutsche Bank, que es un banco comercial y también con sede en Frankfurt, al igual que en Frankfurt y no en Bruselas está el BCE o Banco Central Europeo), tiene su oficina central o sede no en Berlín, la capital política, si no en Frankfurt, la capital financiera, y luego sucursales en cada estado federado; pero, claro, la puta mierda de España no es Alemania, por favor...
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