Para el gobierno francés las Operaciones Exteriores del Ministerio de Defensa han tenido un coste, en este año 2012, de cien mil euros cada hora del año.
Menos que en el 2011 en que hubo que financiar la Guerra de Libya.
En este coste no se incluyen ni los sueldos de los militares, que con Opex o sin se tendrían que haber pagado igual, ni la adquisición ni mantenimiento de materiales.
En el sobrecoste se contemplan las primas que se pagan a las tropas y oficiales cuando están en Opex, así como el consumo suplementario de municiones (algunos missiles y bombas guiadas aéreas cuestan millones) y la eventual pérdida o destrucción de materiales.
Coronel Von Rohaut
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