Después de Libya, y por el mismo motivo o excusa (ya que el antiamericanismo y anti-occidentalismo era latente), han sido atacadas las embajadas americanas en Túnez y Egipto, países todos ellos que han pasado por la "primavera árabe" que, en lugar de una primavera o renacer democrático y tal como yo me temía, más parece se hunden en un invierno integrista, se convierten en un infierno salvaje, musulmán y teocrático.
También han habido disturbios en otros países islamistas como Sudán, Líbano (*), India y Pakistán, Yemen, etc.
Y la US Navy ya está enviando navíos de guerra (incluido un buque de desembarco) y "marines" para proteger las sedes diplomáticas, así como unidades de Fuerzas Especiales expedidas en aviones C-130 "Hercules".
(En la foto de abajo, un "marine" de guardia en la azotea de la embajada USA en Doha, capital de Qatar).
Que también las sedes de Alemania (foto siguiente) y Francia están siendo atacadas, y quizás no haya suficientes fuerzas disponibles para atajar las llamaradas de los levantamientos masivos; de una "jihad" imparable.
Insisto en que al final nos veremos obligados a exterminarlos a todos o ser vencidos, dominados y esclavizados por las turbas mahometanas.
Mira que hace tiempo que lo vengo diciendo...
Coronel Von Rohaut
(*) Donde el Papa acaba de aterrizar para consolar a los pobres cristianos maronitas y francófonos que antes dominaban y lideraban un país rico, prospero y occidentalizado a tope, y ahora viven atemorizados entre una mayoría aplastante de bárbaros mahometanos (refugiados palestinos y terroristas de Hezbollah).
Primero los encumbran, mi coronel, y a ¿ahora qué? El problema está en los islámicos que hay en Europa. Tienen dinero por el petróleo, están organizados y se les ha entrenado bien en las artes del terror y la guerra subversiva.
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