Cuando yo era pequeño en la escuela (francesa) recuerdo un libro que, entre otras buenas maneras, insistía en la higiene personal y la necesidad de lavarse a diario, dientes, etc.
Pero mira si los gabachos iban atrasadillos en cuestión de bienestar higiénico (*) que en lugar de hablar de la reparadora ducha matinal, hablaban del "tub", así escrito en inglés, o vulgar barreño, y muy visto en ciertas pinturas impresionistas de Degas, del siglo XIX. O sea, una gran palangana...
Coronel Von Rohaut
(*) Pasada ya la IIGM, en las casas de pueblo de Francia el retrete todavía estaba en una caseta separada, en el patio. Y en el mismo Paris, muchos pisos y no forzosamente de barrios marginales, no disponían de baño propio si no que tenían un retrete común en cada rellano; unos amigos de mis padres estaban contentos porqué, si bién lo tenían fuera del piso, era para su uso exclusivo y no compartido...
No hay comentarios:
Publicar un comentario