Alguien tenía que decirlo...

Está claro que la pérdida de votos, notable, por parte de CIU pero recuperados por ERC, más que a la sucia campaña pepera y gubernamental española, se ha debido a la poca confianza que inspiraba la recién inaugurada etapa soberanista de Artur Mas y sus "malas compañías".

Pero hoy lo que llama la atención del lector avisado es la mala leche desinformativa de los dirigentes peperos y sus altavoces mediáticos: solo hay que leer los titulares de la prensa "brunetense", panfletaria y españolísima: "Junqueras le niega el apoyo a Mas", "ERC se desmarca de un gobierno de coalición", "La consulta soberanista se aleja", etc. O sea, mas reflejo de sus oscuros deseos que de la información en sí y ¡Viva España!

Porque en la realidad, lo que se está sabiendo es que ERC no desea entrar en el gobierno (lo que ya se verá y, además, me parece pulcro y honesto) pero le promete a Mas pleno apoyo para la investidura/gobernabilidad y total colaboración para seguir con el proceso de consulta popular sobre la independencia.

Lo único que debería hacer el Mas, en un futuro próximo y asegurándose que ello no le reporte pérdida de escaños o votos parlamentarios, es deshacerse del puto Durán i Lleida (*), caballo de Troya del españolismo dentro de CIU, más que enlace con los sectores menos independentistas de la sociedad catalana. Que los hay pero a los que ahora ya debe mandárseles a tomar pol culo.

Coronel Von Rohaut

(*) Cuando ya seamos un estado soberano y él ya no represente un estorbo,  ya lo haremos Ministro de Asuntos Exteriores, que es su gran sueño y que lo haría muy bien.