Los tarados mentales que le exigen al Rajoy (y demás sospechosos habituales) que presente sus declaraciones, y los benditos de Dios que aplauden cuando éste dice que las hará publicas, deberían hacérselo mirar por un especialista en deficiencias mentales graves.
¿Porqué a que criatura de Dios se le ocurriría poner en su declaración de la renta unas cantidades cobradas en metálico, sin ningún justificante, y procedentes de una cuenta opaca de dinero "negro" o cuenta "B" que no figura en ninguna contabilidad oficial?
Bueno hay gentes que quizás sí, como esta mañana que le he oído decir a un periodista que él cree en los Reyes Magos y Papá Noel, en el ratoncito Pérez y en las portadas de "La Razón".
Durante muchos y muchos años, en tiempos del franquismo, yo cobraba la mayor parte de mi sueldo mensual en un "sobre negro" (era marrón, con mi nombre a lápiz). Naturalmente, en mi declaración de renta solo ponía las cantidades que venían en mi "hoja de salarios" oficial. Y como que el gobierno, ya entonces, era consciente de tal anomalía, te hacían cotizar por lo que entonces llamaban "signos externos" o sea, si el alquiler o el valor del o de los pisos, viajes de placer y gastos suntuarios (así se llamaban y nadie los declaraba) y coche/s que tenían que figurar en tu declaración oficial superaban, en renta estimada (había unos baremos), a la declarada, cotizabas por la primera, pero sin ninguna sanción adicional. Naturalmente y como siempre, los ricos, que podían tener sus pisos y coches a nombre de una o varias sociedades (las "queridas" o fulanas se conocían pero se callaban), seguían sin pagar nada; como ahora, que nada nuevo hay bajo el sol.
Coronel Von Rohaut
Los políticos se ríen de nosotros, mi coronel. No creo que uno de los de los sobres sea Rajoy, era registrador en Calpe y ahí podría haber ganado mucho dinero. Todos los partidos con poder son mafias cerradas que se financian con mordidas.
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