Ahora que los franceses están evacuando el Mali después de la batalla ganada a los islamistas, se teme que pronto, rehechos de sus heridas, estos vuelvan a intentar la ocupación del Sahel (Mali y Niger).
De momento y según informaciones fidedignas, unos 400 combatientes que consiguieron escapar de la embestida francesa y, cerrada la frontera de Argelia, se han refugiado en la inhóspita (*) región del Erg Oubari, en el extremo suroeste de Libia.
Zona recién declarada militar pero sin control, ni presencia de policía ni ejército de Libia, y a la que nadie se atreve a ir ni a vigilar y en la que cualquier intervención armada queda descartada. Es territorio de los tuaregs libios, que lo han cedido a los djihadistas del Aqmi, a cambio de sus redes de tráfico de drogas que ahora explotan ellos. En este santuario los islamistas radicales y terroristas esperan crecer y fortalecerse para volver al ataque.
Ya lo dijo el sabio, el único "moro" bueno es el "moro" muerto. Y siempre hay que rematarlo para que no renazca.
Coronel Von Rohaut
(*) Aseguran que ni con el GPS puedes aventurarte en ella con un 4X4, si no es con los poco fiables guías touaregs que conocen los campos de minas, pasos seguros y puntos de agua, poblados en los que abastecerte e informarte, etc.
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