El sistema de missiles anti-misiles "Iron Dome" de los judíos se comportó bién en los últimos ataques con cohetes de Hezbollah pero ahora Siria podría tener el missil iraniano de largo alcance "Fateh-110" que, sobre una ciudad como Jerusalem, podría causar una catástrofe.
Los israelíes afirman que ya disponen de una contra-medida, con el nuevo missil interceptor "Arrow-2", en la imagen y que nunca ha entrado en combate pero ya está siendo probado.
Y conjuntamente con los USA ya están preparando el sistema (el radar es una de las partes mas importantes) "Arrow-3" para interceptar missiles enemigos fuera del espacio y al poco de ser disparados, con el fín de minimizar los daños que una destrucción sobre suelo israelí (pequeño y muy poblado) podría causar.
Pero los judíos son conscientes que un sistema de defensa estático jamás puede dar una garantía del cien % y que el "riesgo O" no existe en seguridad nacional.
Por ello han realizado varios "raids" aéreos, que sigue siendo su arma más perfecta (aparte de la "inteligencia" o información) para bombardear bases o sitios de lanzamiento y/o almacenaje de missiles enemigos. Más vale prevenir que curar.
Y nadie, en el mundo occidental y menos los americanos (ni yo, por descontado) se lo criticará...
Coronel Von Rohaut
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