Sobre el diálogo político y la desfachatez, la hipócrita impostura de los políticos hispanos

¿Por casualidad se acuerda alguien ahora, de cuando el mismo señor Don José Maria Aznar (entonces presidente del PP) y en relación a las conversaciones de paz con la ETA de los vascos, proclamaba, alto y fuerte y en primera página de los periódicos?

"Con ETA se puede negociar cualquier tema, hasta de la independencia se puede hablar, siempre que se hayan abandonado las armas, sin las pistolas encima de la mesa".

Bien; pues Catalunya, que nunca ha utilizado el terrorismo, jamás ha empuñado las armas ni las ha puesto encima de la mesa. Y que, de momento, solo quiere negociar la posibilidad democrática de hacer un "referéndum", una consulta popular, en las urnas y legalmente, para preguntarles a los catalanes cual es el futuro que desean para su país, solo se encuentra con las mismas y repetitivas respuestas de parte del "moderado" (dentro de las parámetros del PP) señor Rajoy: "no, nada, es imposible, jamás lo acordaré".

Pues esto es para que lo aprendan los catalanes gilipollas que preconizan "terceras vías" o líneas de entendimiento con España y sus gobernantes. No pactes jamás con los castellanos, que siempre te joderán. Mentir, romper los pactos tácitos o escritos y faltar a la posible "palabra dada", lo llevan en la sangre, está en su ADN. Son unos bandoleros, unos salteadores de caminos, unos delincuentes "chupópteros", rapaces y parásitos, amorales y "mamandurrias", y más falsos que un "duro sevillano".

¡Que no, coño, que los castellanos no son de fiar! Que la única vía catalana de supervivencia es la que lleva, pactada o no, acordada o por simple Declaración Unilateral, a la independencia de la nación, la separación de Catalunya del Estado Español, la adopción de la plena "soberanía nacional", la creación de una República Catalana con todos sus atributos y aparato administrativo de gobierno, un "Estat Catalá".

Coronel Von Rohaut