Hace pocos días, y a su gran contento y satisfacción, el presidente Rajoy fue recibido algunos minutos en el Despacho Oval de la Casa Blanca, justo para hacerse la foto con Obama (es lo que deseaba), y el presidente le obsequió con una caja, personalizada para la Casa Blanca, de caramelos o chocolatinas (candies o smarties) de la marca M&M.
Pocos días después los Obama (incuida Michelle a pesar que el Hollande iba sin compañera) recibieron al primer mandatario francés, incluida una cena de gala en la Casa Blanca. Y el obsequio fue una mesa de madera que lleva incorporada una parte construida con un roble de Mount Vernon, la residencia de George Washington; así como una réplica artesanal de la llave de la Bastilla.
Está claro que no todas las visitas reciben el mismo trato protocolario...
Coronel Von Rohaut
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