Tiene razón el impresentable Ministro del Interior, el vallisoletano por un tiempo asentado en Barcelona que no por ello catalán, el Jorge Fernandez Diaz, cuando dice que la sociedad catalana está fragmentada.
Un periodista ha llevado a cabo una encuesta entre los políticos de diversos partidos catalanes o sucursales catalanas de partidos españolistas (Convergència, Esquerra, PSC, ICV, CUP, Ciudadanos, etc.) y efectivamente, peguntados sobre que
"bolets" preferían ir a buscar (
"a caçar bolets"), hubo mucha diferencia porcentual, según partidos, entre los amantes de los
rovellons (
níscalos o lactarios de la ultima imagen),
llenegues (deliciosos
higróforos),
ceps o siurenys (excelsos
boletus edulis de la segunda imagen),
fredolics (
negrillas),
rossinyols i camagrogs (rebozuelos),
moixernons (
senderuelas),
múrgolas (
colmenillas),
xampinyons (
champiñón) y los imperiales
ous de reig (
oronjas o amanita cesarea, imagen inferior y no confundir con la farinera borda o amanita phalloides, que puede ser mortal ), etc.
Es cierto, la sociedad catalana está altamente fracturada, una fractura social causada por
"els bolets" (las setas...), una menja exótica a la España castellana que la
Constitución Española debería prohibir terminantemente, bajo pena de excomunión castellano-patriótica.
Coronel Von Rohaut
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