Este pasado invierno el "govern" Mas, de la Generalitat catalana, urdió un plan para que las compañías energéticas no pudieran cortar, por impago, la luz y el gas a las familias necesitadas. Era una política contra la "pobreza energética".
Y el muy humano gobierno central del PP lo impugnó "porqué rebasaba las competencias de la Generalitat", en palabras de la enana Soraya (enana física y mentalmente).
Ahora la alcalde de Barcelona, Ada Colau, en una iniciativa destacable y en la que la ha seguido la alcalde Madrid y los ediles de otras muchas urbes españolas (laicos y de izquierdas), ha puesto en marcha un plan de acogida y asilo de refugiados de Siria y otros lugares sensibles (*).
Y la Soraya ha vuelto a aparecer por la tele para avisar que ello ha de ser objeto de una coordinación (que seguramente creará retrasos e impedimentos) con el gobierno central, ya que "las políticas de exiliados son de estado".
Viva el PP que antepone "sus competencias" al auxilio a las personas necesitadas o en situación extrema...
¡Al infierno, y de cabeza, irán todos estos líderes de la España nacional-católica!
(Que la Soraya y la Cospedal van a las procesiones de Toledo con su mantilla y su peineta...)
Coronel Von Rohaut
(*) Que antes de acoger a refugiados sirios podría preocuparse de buscar soluciones a los que ya están aquí en Barcelona, como "los manteros" (que molestan, pero es su "modus vivendi")
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