Los catalanes nunca conseguiremos un arreglo pactado con el oscuro, trilero y centralista gobierno hispano-castellano. Ni siquiera para un simple referéndum para conocer la voluntad de los habitantes de Catalunya (que yo ya no quiero para nada ahora y ya lo haremos cuando seamos independientes y solo para refrendar la nueva Constitución) y mucho menos para negociar la secesión de Catalunya, como en su día y no hace tanto, hizo Eslovaquia con la República Checa o, antes (en 1905), Noruega de Suecia.
Por lo tanto, si los actuales lideres políticos catalanes son auténticamente independentistas (a veces tengo mis dudas...), deberían dejar de marear la perdiz y perderse en inútiles quiebros semánticos y en excusas leguleyas y demoras que nadie quiere y, de una puta vez, declarar la independencia unilateralmente mediante una declaración (DUI) del Parlament, que ya es democraticamente soberano (*).
¡Y a tomar pol culo...!
Coronel Von Rohaut
(*) Y a recabar los apoyos internacionales que, una vez tomada la decisión y que vieran que vamos en serio y no de farol o de coña, seguro no nos faltarían, pues todavía quedan países serios y muchos que ya hicieron el mismo camino que nosotros.
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