viernes, noviembre 03, 2017

Una pequeña digresión

A raíz que Carles Puigdemont se haya desplazado al "plat pays", a refugiarse en Brussels (Bélgica) para protegerse físicamente de las garras de la Inquisición Imperial Castellana, no es cierto que el abate Mariano Rajoy haya nombrado a Sor María Soraya Sáenz  de Santamaría Antón, gobernadora general y plenipotenciaria de Castilla en Flandes para que lo persiga y castigue debidamente (descuartizándolo si es preciso y comiéndole los higadillos...), y que el rey Borbón Felipe VI de Castilla le haya otorgado el renovado titulo nobiliario de "Duquesa de Alba" con el fín que pueda llevar a cabo su importante y cruenta misión, con el mayor de los éxitos y el máximo de respaldo de la "venerable" historia de Castilla en los Países Bajos (*).

Coronel Von Rohaut

(*) Provincias españolas cuyos bravos habitantes de raza neerlandesa todavía hoy cada día se emborrachan (con una buena cerveza trapense) para celebrar el haberse librado de la brutal soldadesca castellana
(los "Tercios de Flandes" que pillaban y saqueaban, violaban y atropellaban, como buenos castellanos, bravos y hambrientos, que ya eran entonces).

Y a los niños de Holanda, cuando se portan mal, sus madres, en lugar de amenazarles con que vendrá "el hombre del saco", les dicen "mira que vendrá el Duque de Alba", y se refieren a
Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, III Gran Duque de Alba, cuyo recuerdo que dejó en Flandes y Países Bajos es para cagarse (de terror)...

No hay comentarios:

Publicar un comentario