El llamado Llarena ya se ha pronunciado y ha dicho que no aceptará que los alemanes (¿qué se habrán creído estos engreídos...?) le extraditen al Puigdemont solo por malversación (la que ya veríamos si la hay...) y le han dicho y repetido que, para nada, hubo ni rebelión ni sedición, por falta absoluta de violencia y contrariamente a la ridícula falacia sostenida por los malvados castellanos...
Y tampoco recurrirá, como había dicho, a Luxemburgo, al Tribunal Europeo. No por lo que dice él, sino por el miedo a perder, el terror a volver a hacer el ridículo y le den otra hostia en la moral...(*)
Y escuchar a algunos dirigentes peperos, como el Maroto, explicar y tratar de justificar la decisión del juez prevaricador, es para sacarse la "minga" y echarse a mear (**).
Coronel Von Rohaut
(*) ¿Y si le dá miedo perder, no será porqué sabe perfectamente que no tiene ninguna razón...?
(**) Ay, no, delante del Maroto no, que se puede emocionar...
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