En la región del Alto-Rhin y cerca de la frontera suiza, este es el lugar exacto, marcado por una estela, donde se posicionaron las líneas francesas y alemanas.
Aquí empezó (*) lo que luego se transformó en una sangrienta batalla de trincheras en las que, entre inmundicia, lodo y barro, y ratas, los soldados morían por centenares cada vez que sus oficiales gritaban "al ataque" y, en cuanto asomaban la cabeza, les esperaba una línea de ametralladoras que segaba sus vidas o les mutilaba.
Muchos se negaban a atacar y los oficiales franceses se hartaron de dictar penas de muerte y fusilamientos por "cobardía ante el enemigo, y traición". Pero todo esto no se supo hasta mucho más tarde y se reflejó muy bien en la excelente película de Stanley Kubrik, con Kirk Douglas (que la produjo), "Paths of Glory" (Senderos de Gloria).
Coronel Von Rohaut
(*) Luego los alemanes invadieron Francia a través de la neutral Bélgica, cuya neutralidad se pasaron por el forro de los cojones...
No hay comentarios:
Publicar un comentario