Ser "nazi"

Muchas veces me cabrea la alegría con la que se acusa a alguien de "nazi". Sobre todo los dirigentes peperos tipo Acebes y sus "amiguetes", los de la tertulia de Pedro Jota y Losantos, tildan a los etarras y batasunos de "nazis", cómo sinónimo de totalitario o anti democrático. Y no es eso.

En su día, los dirigentes de ETA se manifestaban, políticamente, de "maoistas" o comunistas de tipo albanés. Y esto no es ser "nazi". No es nada bueno, pero no es "nazi". Mas "nazis" encuentro yo precisamente al Losantos y a todos sus amigos post-franquistas y neo-falangistas.

Leo ahora que unos grandes almacenes ingleses han dado de baja, como imagen de su marca, a un cantante que había manifestado su gusto por la "estética nazi" y al que, por lo tanto, acusan de "nazi".

Pues no señor. No es lo mismo. Yo no soy "nazi"; mi padre pasó cinco años en un campo de concentración alemán durante la segunda guerra mundial y nunca he escondido mi posición pro israelita, pro judía y contraria a todo anti semitismo.

Pero también me gusta cierta estética "nazi".

Como aficionado a las armas, me encantan las del Tercer Reich, la metralleta MP-40 (mal llamada Schmeisser), la pistola P-08 (mal llamada Luger) la ametralladora MG-42, el carro Tiger y el cañón Flak 88.

Las dagas de las "SS" y el Mercedes 770 K de Adolf Hitler.

También el uniforme negro y el himno de las Panzer Divisionen y los uniformes de gala de los generales y mariscales del Reich y el escudo del DAK (Deutsche Afrika Korps).

Y no porqué me guste circular por autopista, invento de Hitler, me voy a considerar "nazi".

Ahí queda eso...

Coronel Von Rohaut