Parece que José Tomás hizo una gran faena en la Plaza de Toros La Monumental, de Barcelona. Cortó 5 orejas a 6 toros y estuvo sensacional.
Y muchos aficionados al toreo aportan este dato para justificar la pervivencia de tal salvajada en tierras catalanas.
El mismo Director de La Vanguardia, el Antich y en su Editorial, dice que siguiendo la tradición liberal de Catalunya, el que quiera ir a los toros que vaya y el que no quiera que no vaya, pero que prohibir por decreto no es democrático.
Primero, si se prohibiera por decreto sería en atención a las miles de firmas que lo han solicitado y si lo decidiera el Parlamento en una ley, sería totalmente democrático, como democrática fue la supresión de la pena de muerte en casi todos los países civilizados y la cual, por cierto, todavía hay personas que aprueban y reclaman (y hay gentes que la merecen...).
Si a mi no me gustan los toros (que no es verdad, sí que me gustan pero los quiero prohibir por ética y por decencia) puedo dejar de ir. Pero si dejo que sigan yendo a dicho bárbaro espectáculo, digno del circo romano de hace muchos siglos, los que sí les guste, estaré dejando que se siga torturando a un pobre animal, que ni tiene ninguna culpa ni lo ha pedido voluntariamente (como un boxeador, por ejemplo).
Torturado y cruelmente matado (ya que la espada no siempre acierta a la primera) únicamente para el deleite y solaz de unos cuantos desalmados que, si disfrutan viendo la tortura de un ser vivo, por más artística que sea su agonía, es que no son buenas personas o que les puede su atávico, salvaje e incivilizado subconsciente animal, su parte de cerebro de cuando eran un puto reptil !!!
Perdón, lo que acabo de decir no es cierto ya que los animales solo matan para comer o ante lo que consideran una amenaza y no se sabe de ninguno que disfrute haciendo sufrir. Esto es patrimonio del hombre...
Coronel Von Rohaut
No hay comentarios:
Publicar un comentario