¿Y ahora, qué?

Pues después de las elecciones USA y la renovación de Obama ("Four more years" Oh, yeah), a nivel militar y geoestratégico no van a cambiar grandes cosas, ya que se trata de un continuísmo; no si hubiera ganado el Romney.

De momento destacan dos temas, uno malo y colateral y otro bueno.

1. No han renovado su escaño ni el Representante por Florida, el republicano Allen West (que ha sido sustituido por un demócrata), ni otros diputados del Tea Party y que formaban parte del "lobby" anti musulmán del Congreso. Ya Obama había hecho retirar de los cursos de formación antiterrorista del ejército, la doctrina apoyada por West y los suyos (y en este caso y solo en este, los míos ¡coño!), que rezaba que todo el Islam es un Islam integrista y en sí mismo una fuente de terrorismo (la Jyhad o guerra contra el infiel, predicada en el mismo Corán). West, de raza negra, se había jubilado del ejército con el grado de teniente coronel. Y hora, los putos "moros" de los USA quizás serán menos perseguidos y vigilados; ojalá no hagan de las suyas...
2. Y Obama va a seguir, incrementándola, su política de perseguir a los terroristas, especialmente en África, con los medios aéreos no tripulados, los limpios y quirúrgicos "drones" armados, cuya flota no para de crecer. Y drástica disminución de la política de "boots on ground" o envío de fuerzas terrestres de ocupación, políticamente incorrecta y con gran oposición social. Las que si se incrementarán exponencialmente serán las operaciones puntuales y más o menos secretas o encubiertas, realizadas por unidades de Operaciones Especiales (Spec Ops) desde bases como la de Djibouti, que no para de crecer; como crecen el número de SEAL's, Ranger Regiment, etc.

Coronel Von Rohaut