Que, en el fondo, el Rajoy es un hombre honesto. Cuando en su comparecencia y para defenderse de las acusaciones del Bárcenas dijo:
- ¡Todo es falso! Salvo alguna cosa...
O sea, su bondad le impidió mentir del todo y absolutamente; dejó abierta una rendija a la verdad.
Pero tampoco tuvo cojones de reconocer que todo, absolutamente, era cierto y aún me quedo corto.
Como dice hoy un columnista, con las ultimas declaraciones de gente cercana a la sala de máquinas del PP, ha quedado demostrado que este partido (como muchos otros partidos políticos españoles y "mafias" varias) era una maquinaria diseñada para delinquir, estafar, y que sus militantes (los de la cúpula) estaban en ella (en la política) para forrarse... Y se forran...
Cuando pienso en los pobres y honrados militantes de base (que los hay) y que en todos los partidos se arremangan y cuando hay elecciones, por ejemplo, salen (o salían antes, ahora cada vez menos) a la calle para, voluntaria y gratuita y desinteresadamente, pegar carteles, montar mitines, hacer campaña de diversas y esforzadas formas, etc. Mientras sus jefes se llenan los bolsillos a manos llenas.
Y lo mas vergonzosos es cuando estos sacrificados "padres de la Patria" se lamentan del dinero que pierden al dedicarse a la política, lo poco que cobran al servicio del país frente a lo que ganaban o ganarían en la empresa privada. Por lo menos que no lo digan más ahora que se sabe que, con los sueldos oficiales, las dietas y complementos que casi nunca declaran, y los complementos, sobresueldos o sueldos "en negro" que ahora se están sabiendo, se llevan un pastón de la virgen.
¡Todo por la Patria! Como rezaba antes en las puertas de los cuarteles de la Guardia Civil. Pero todos sabíamos que quería decir "Todo por la Tapia", por la cantidad de cosas (comida, ropa, etc.) que saltaban por ella.
Ahora ya no saltan chuscos o latas de sardinas para alimentar a los hijos. Saltan concesiones de obras públicas, enchufes y canonjías o, directa y descaradamente, comisiones multimillonarias y fajos de billetes que vuelan hacía Paraísos Fiscales.
Coronel Von Rohaut
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