¡Pero qué coño vamos a ser iguales!

Mi admirado Sala i Martín, y el otro día por la televisión, excusaba un poco a la constructora española Sacyr por su trampa en la licitación del Canal de Panamá y explicaba que esta forma de actuar está generalizada en todo el mundo.

Pero es que Sacyr-Vallehermoso, además, está enmerdada en el caso Gurtel/Bárcenas, de financiación ilegal del PP y ahora, un juez, acaba de descubrir que varios de sus dirigentes (en la imagen, su ex-Presidente, del Rivero, también dirigente del Real Madrid y asiduo a su palco/centro de negocios e influencias) tenían cuentas escondidas en Suiza.

Mientras que, hace poco, contaban que en Suecia, en los ultimos 150 años, no se ha dado ni un solo caso de juicio por corrupción política.

¡Y unos huevos, los putos españoles son iguales que los suecos!

Coronel Von Rohaut