Mariano Rajoy trata, en estas elecciones, de erigirse en líder para la defensa de la Patria española y llama a consulta (a rebato) a todos los suyos (el Sánchez del PSOE, el Rivera de Ciudadanos), así como a otros varios pequeños como Podemos, para disimular y que no se note tanto el "Frente Nacional" de "Todos contra los catalanes".
La idea es aglutinar, en la lucha anticatalana, a todas las fuerzas políticas hispano-castellanas para, detrás de esta cortina, excusa o hábil coartada del "enemigo exterior común", que en estas elecciones no se hable de la inmensa corrupción del PP y de las nefastas políticas sociales que este partido ha llevado a cabo.
Es la reproducción de un nuevo "Movimiento Nacional Español" del que el Rajoy pueda ser el líder indiscutible, el nuevo "Caudillo" que ha de llevar a su pueblo español hacía la victoria frente a los sediciosos, avariciosos, desleales y peligrosos separatistas catalanes, huestes extranjeras al pétreo e integrista sentimiento español y a los que hay que vencer y hundir para siempre para mayor gloria de la Patria castellana.
¡Castilla solo acepta la rendición incondicional! (*)
Coronel Von Rohaut
(*) Dijo Rajoy, "nada tengo que hablar con los catalanes ya que nada les debo ni nada tengo que ofrecerles". Pero es que ahora ya nada queremos; ya no más caridad, baratijas ni migajas. Es la hora de la independencia como, en su día, Cuba y las demás repúblicas sudamericanas, colonizadas y expoliadas por España....
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