Igual que cuando anunciaron unilateralmente (y lo han cumplido a rajatabla) que renunciaba a la violencia y al terrorismo, cuando ahora ETA anuncia su disolución el estado español responde, no con generosidad como haría un gobierno civilizado, sino con desprecio, aplastamiento y escarnio, que es la única estrategia que, de siempre, practican los hispano-castellanos, haya o no haya violencia, como en el caso catalán.
¡Yo os maldigo, malvados gobernantes imperialistas castellanos de mierda, hijos de la gran puta!
Coronel Von Rohaut
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