Fusiles de asalto

Durante la 2ª Guerra Mundial los alemanes, que han sido siempre unos buenos guerreros y armeros (unos grandes mecánicos y metalúrgicos), observaron que la mayoría de combates entre infantes tenían lugar a 150/200 metros de distancia o menos.

Los rifles de cerrojo o repetición manual, con munición de alrededor de 7 mm. de calibre (7,62 o 7,92 etc.) y con vaina de más de 50 mm. de largo, cargada con pólvora sin humo (nitrocelulosica, cordita, etc.), cómo los Mauser, Lee Enfield, Springfield, etc., eran un invento de finales del siglo XIX . Tenían un alcance de más de 2 kilómetros y una precisión aceptable hasta casi 800 metros. Excesivo para las necesidades tácticas de los ejércitos, a excepción de los rifles para francotiradores, los "pacos" en español de entonces o "snipers" en anglosajón, pero ésto es otro tema.

En cambio, más que largo alcance, los alemanes entendían que era preferible la potencia de fuego, el tiro automático en ráfaga, para lo que también era necesario rebajar la potencia de la munición empleada, para reducir la reelevación del arma con los disparos seguidos. Y pusieron a punto el primer "fusil de asalto": el "Sturmgewehr 44" o "StG44", de calibre 7,92x33 o sea, igual diámetro que su rifle Mauser pero más corto de vaina y con menos carga de pólvora.

Cuando los rusos crearon su universal fusil de asalto, el rustico pero tremendamente fiable y eficaz y fabricado por millones de unidades, "Kalashnikov" o AK-47, siguieron la misma teoría y lo hicieron en calibre 7,62x39.

Luego los americanos, con su Armalite/Colt AR-16, de Eugene Stoner, el M-16 en su denominación militar, dieron paso a la teoría de cambiar peso por velocidad de la bala y reducir su diámetro para que los soldados, con el mismo peso, pudieran acarrear más cantidad de munición y también que el arma que la disparaba fuera más ligera. Y pusieron a punto el calibre 5,56x45 (.223 en pulgadas), que es el actual "standard" para todos los fusiles de asalto occidentales.

Pero cuando en Europa se empezaba a introducir el concepto de fusil de asalto (por ejemplo, el excelente belga FN-FAL o el español CETME) los americanos aún no aceptaban la munición de carga reducida, lo que sí habían entendido que era preferible los rusos. E impusieron, en la unificación o "standardización" de la NATO, el calibre 7,62x51, derivado del 30.06 de su fusil "Garand" de la 2ª Guerra Mundial, semi-automático o sea sin cerrojo y con recarga automática y por ello superior al Mauser alemán y al Lee-Enfield inglés, pero que no disparaba en ráfaga.

Por ello, los soldados españolitos estaban todos muy orgullosos de su CETME, arma homologada con las de los demás países de la OTAN, de la que España aún no formaba parte. Pero que pesaba la hostia y no se podía disparar en ráfaga, al menos no con precisión, pues se encabritaba cómo un caballo salvaje y era incontrolable.

Cuando España se pasó al nuevo calibre pequeño de 5,56, puso a punto el CETME L, pero era tan malo que fallaba más que una carabina de feria.

Ahora veo fotos de soldados españoles en Kosovo, con sus flamantes fusiles de asalto comprados a Alemania los "Heckler&Koch" o HK G-36. Por primera vez tienen entre manos algo bueno, moderno y eficiente. Es uno de los mejores fusiles de asalto del mercado mundial. Posiblemente superior al M-16 A2 americano, pero sin tantas versiones.

Superior, sin duda, al francés "Famas" F-1 o G-2 y mucho mejor que el inglés SA-80 (Enfield L-85A1).

Posiblemente el mejor de todos sea el "SIG SAUER" o "SIG" SG-550 y versiones derivadas, practicamente sólo utilizado por el ejercito suizo. Es una verdadera joya de precisión, un reloj suizo, pero muy caro. España lo evaluó pero optó por el G-36, por su costo. Francia se decidió por su mediocre "FAMAS", por nacionalismo y porqué siempre es preferible disponer de armas de fabricación propia y no depender de suministros extranjeros. Pero cuando todavía no lo tenía a punto, dotó a algunas unidades de élite, como el "GIGN" de la gendarmería y a tropas paracaidistas de la Légion, con algunos "SIG" adquiridos a Suiza. Y cuando después se los cambiaron por los "FAMAS", los militares franceses que los habían utilizado casi lloraban....

Coronel Von Rohaut