La justicia española y Viva la Pepa

Leído en una misma página de periódico:

Un señor, propietario de un taller mecánico, por falsificar una tarjeta de "zona verde" que le permita aparcar su furgoneta frente a su taller (mal, muy mal hecho), es enviado a la cárcel, según el juez, "por peligrosidad".

Dos rumanos (gitanos, "of course"), con antecedentes o sea, delincuentes habituales y reincidentes, son detenidos por la policía por robar cable de cobre por valor de 43.000 euros y el señor juez les deja "en libertad, con cargos". Naturalmente, si después del juicio, que ni se sabe después de cuantos años tendrá lugar, les quieren encarcelar, ya los podrán ir buscando, que allí se estarán "fumando espero...".

Igual que ha pasado con violadores que siguen en libertad para que puedan seguir violando (hojalá se lo hicieran a la madre, la esposa y la hija del señor juez), tíos que, no presuntamente si no después de haber sido juzgados y condenados en firme por violar a su propia hija, no entran en la cárcel y siguen violando y matando. Chorizos que han robado cientos de veces y cientos de veces han entrado al juzgado y han salido al cabo de pocos minutos por la misma puerta y ante la desesperación de los policias que no paran de detenerles, mafiosos excarcelados por algún juez amigo o "trincón", personajillos condenados a varios años de cárcel y que salen, con cualquier excusa, a los cuatro días, "famosos" (cómo "los Albertos") que, presuntamente, han estafado miles de millones y ni siquiera pasan por el "cuartelillo" u otros que están en la cárcel pero, sin haber devuelto, que se sepa, ni un duro de los millones robados, gozan de permisos y vacaciones (cómo el Mario Conde) y encima cobran grandes subvenciones agrícolas de la U.E., por las fincas que, seguramente, compraron con los millones "desviados", etc. etc.

Y a un político andaluz que dijo que, en España, la justicia "es un cachondeo", a él sí le querían meter en la trena.

Un cachondeo no, es para cagarse...

Coronel Von Rohaut