Si bien en el Principado de Catalunya, con dificultades y toda clase de trabas, resistimos los embates del ministro Wert y sus huestes recentralizadoras y españolizantes, en el País Valenciano, Franja de Aragón y Baleares, este año pasado ha sido el peor, desde hace mucho tiempo, para la lengua catalana (donde también es oficial, cosa que nuestros enemigos, demócratas que te cagas, se pasan por el forro de los cojones).
Porqué en Catalunya media docena de familias pidieron la enseñanza de sus hijos en castellano, hubo que modificar los planes de estudios de varias escuelas y muchos alumnos, compañeros de clase de los reclamantes y que no lo deseaban, se vieron afectados; los intereses de una ínfima minoría, por encima y perjudicando los de la inmensa mayoría. Pero la minoría era castellana...
Mientras que en Valencia, miles de padres reclamaron la enseñanza en catalán, a lo que tienen derecho por la misma ley, pero no lo consiguen. El gobierno valenciano ni les contesta o sea, les manda a tomar pol culo; en castellano, claro.
La falta de colegios adaptados y/o de clases, de profesores y de medios de toda clase, pero sobre todo la actitud de sus gobernantes vendidos al centralismo madrileño, han abocado la enseñanza del catalán en esas zonas catalanoparlantes, a sus niveles más bajos. Sumado todo ello a la prohibición o imposibilidad de sintonizar TV3, Catalunya Radio, etc.
Es una guerra declarada, despiadada y en la que todo vale. Lo único que podemos hacer, los catalanes del Principado, es resistir y, cuando seamos independientes y tengamos los medios económico suficientes, ya veremos cómo ayudar a nuestros primos de los "Países Catalanes". Socios culturales y lingüísticos, de pasado común y compartido, sin ningún afán imperialista ni de dominio; que nosotros no somos castellanos, gracias a Dios...
Coronel Von Rohaut
miércoles, septiembre 17, 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario