En un Congreso del año 2000, los socialistas catalanes enterraron el "obiolismo", el socialismo de raíz catalana del propio Obiols y de los Serra, Raventós, Armet, etc., (los llamados socialistas de Sarriá/Sant Gervasi), y algunos herederos del malogrado socialista-catalanista Josep Pallach, que habían dirigido el partido hasta entonces.
Se hicieron con el poder los dirigentes del Baix Llobregat, depositarios del grueso de los votos socialistas, provinientes de los trabajadores inmigrados y de raíz andaluza, extremeña, etc. y que no eran votantes del PSC, sino del PSOE. No votaban a Raventós o Serra sino a González y Guerra. Puro "lerrouxismo" que había estado contenido hasta entonces por el "obiolismo".
Tuvieron que "tragar" con el Maragall, porqué era un icono del socialismo catalán y un cartel para las elecciones autonómicas. Hasta que lo fueron arrinconando, ninguneando y al final, apuñalado por la espalda y sustituído por el Montilla, del "clan" del Baix Llobregat, que ya dispone del poder absoluto. Democrático, sin duda. Pero no catalán ya que no es catalán todo el que trabaja y vive en Catalunya sino el que, además, lo quiere ser.
Y el actual PSC/PSOE, aunque a veces reivindique su catalanismo y no dudo que muchos de sus componentes tengan una cierta afección e incluso compenetración o asimilación, lo que quiere es seguir siendo la sucursal catalana del PSOE y antepone sus intereses partidistas en el conjunto de España a los intereses de los residentes en Catalunya que, muchas veces, son antagónicos.
Es por ello que cuando el Iceta, el dirigente socialista homosexual (lo que no me importa, claro) de Cornellá, predica que "Catalunya no se reafirma enfrentándose a España", tiene toda la razón, pero defiende las posturas de su partido españolista. Y yo no quiero "reafirmarme frente a España". A lo único que aspiro es a librarme de España de una puta vez, para disponer de todos mis recursos, gestionar todo mi patrimonio nacional y cultural, dirigir mi política, decidir mi futuro y hacía donde y con quien quiero ir. Sacudirme el yugo de una nación (la castellana) imperialista y competidora que me exprime y ahoga económicamente para su beneficio; impidiendo mi desarrollo y el bienestar de todos cuantos residen aquí, hayan venido de dónde hayan venido y que, mientras no se les caiga la venda del "nacionalismo español", que es el verdadero enemigo, no conseguirán las cotas de bienestar de las que podríamos disfrutar (cómo los vascos y navarros) si no fuéramos expoliados sistematicamente por el poder central.
"Free Catalonia"
Coronel Von Rohaut
viernes, noviembre 23, 2007
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