En algunas de mis entradas ya había señalado que, a menudo, quien torpedea o sabotea el llamado "estado de las autonomías" no son los propios dirigentes políticos españoles sino, mas llanamente, la masa amorfa, acomodaticia y profundamente centralista de funcionarios, casi todos impregnados de un difuso pero real anticatalanismo o nacionalismo español y que, con el inmenso poder de su propio peso que inunda, anega, desborda y empantana los ministerios, impide toda medida descentralizadora, modernizadora y en relación a Catalunya, ejecutora de un trato justo y equitativo.
En La Vanguardia de hoy y de forma brillante, sobre el Ministerio de Fomento, lo expone Xavier Bru de Sala, la lectura de cuyo articulo recomiendo fervorosamente.
Para aquellos que todavía crean que el "estado de las autonomías" y el encaje de Catalunya en el mismo, es factible. Yo no... ¡Ya no!!!
Después de mas de un siglo intentándolo, con los resultados que a la vista están, quien no asuma que la única solución posible, ahora ya, sólo es la consecución de un Estado propio, es que no lo quiere ver. Y no hay mayor sordo que el que no quiere oír ni mas ciego que el que no quiere ver...
Coronel Von Rohaut
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario