En estos días de dolor y de actos unitarios veo, por la tele, a muchas mujeres musulmanas acercarse a las cámaras para manifestar su condena del terrorismo djihadista. Por ejemplo, en Ripoll.
Muchas jóvenes y hasta guapas, vestidas con prendas occidentales y hablando un catalán perfecto (gracias a la labor de la integradora escuela catalana), pero con sus velos identitarios. Dicen que a veces, al acercarse a alguien, se sienten rechazadas. Y piden no ser discriminadas.
De acuerdo. Pero empezad por no discriminaros vosotras. Vestíos como las mujeres de aquí, sin prendas ni simbolos distintivis, y veréis como rápidamente os sentiréis más y mejor integradas en la sociedad de acogida, que tiene sus propios símbolos y pautas sociales, que deberíais adoptar. El que llega de fuera es el que ha de adaptarse y adoptar las normas ya existentes dentro.
¡Coño, y a ver si lo entendéis de una puta vez...!
Coronel Von Rohaut
domingo, agosto 20, 2017
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