sábado, abril 13, 2019

Gilipollas habituales

Varias asociaciones piden que se retiren o modifiquen o sea, que se censuren, muchos de los libros en circulación y hacen referencia expresa a cuentos infantiles como "La bella durmiente", "Blancanieves" o la "Caperucita roja" así como la mayoría de cuentos de los hermanos Grimm, por sexistas o por atentar contra diversos dogmas de la igualitaria sociedad actual.

De seguir así acabarán por pedir que se censure "El Quijote" así como la misma "Biblia" que tiene escenas de ahí te espero...

¿No sería mejor no tocar las grandes cumbres de la cultura occidental, dejarlas dentro del contexto en el que fueron escritas y, en todo caso, explicar a los niños que ahora las cosas han cambiado y hacerles entender los nuevos paradigmas sin tocar el pasado?

¡Siempre que lo nuevo sea mejor, claro, que no siempre es así...!

Coronel Von Rohaut

(PS) No soy antifeminista ni mucho menos, que conste, pero algunas de las feministas militantes y fanáticas (la mayoría feas que te cagas), verdaderos depósitos de ignorancia, rabia, envidia y mala fé, deberían ser enviadas a la hoguera, por brujas...
Y el mejor ejemplo de feminismo sería el de la científica y matemática americana Katie Bouman (por su apellido, de clara ascendencia judía), del CALTECH (California Institute of Technology) que, a los 26 años y cuando se estaba doctorando en el MIT (Massachussets Institute of Technology), comenzó a crear el complicadísimo algoritmo que ha permitido secuenciar los datos recibidos de los radiotelescopios y crear la primera imagen del agujero negro M-87, y a la que no creo le importe un puto carajo que a la princesa la despertara un beso robado de un príncipe azul.

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