Una monarquía, un Borbón, es demasiado importante para ventilar sus desdichas con uno o dos "posts"; ahí va una tercera entrada.
Con motivo de la hostia africana, los medios de comunicación han publicado un detallado informe de sus once principales dolencias y ocho pasadas por el quirófano: todo un récords digno de un "pupas".
Pero, y yo ya lo había observado hace tiempo, la mitad de ellas por lesiones causadas practicando el esquí. Conclusión fácil por evidente: el rey no sabe esquiar o es un patoso.
O está mal de la vista y está más cegato que la vaca del Maragall (el abuelo poeta) que por falta de vista se iba dando bandazos, trompazos, a diestro y siniestro.
Para tener un inútil como éste, caro y carcamal, o a su hijo casado, incorrectamente, con una golfilla divorciada, mejor una República, a cuyo Presidente lo votas tú y cada equis años puedes mandarlo al paro. Y que al ser un plebeyo que no ha de mantener el simbolismo de su sangre azul, puede ajuntarse y cepillarse a quien quiera, mientras lo haga con una cierta dignidad y decoro.
Porqué irse a cazar elefantes en plena crisis moral y económica del país no es, para nada, mantener la llama, conservar las formas...
Coronel Von Rohaut
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1 comentario:
Querido coronel: De acuerdo en todo
lo que dice, pero cuando oigo a vuecencia hablar de "cambios", no
puedo evitar ponerme a temblar.
Mejor lo dejemos, con esto de la democracia inorgánica igual nos
sale un Zapatero o un Carod.
General Rogelius
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