A pesar que muchos economistas y políticos de "derechas" (para simplificar las clasificaciones) se entozudecen en negar las implicaciones del cambio climático o en minimizar sus riesgos, el Pentágono o Ministerio de Defensa USA, al que nadie acusará de ser una ONG ecologista ni una organización izquierdista, ya se está preparando intelectualmente para las nuevas amenazas.
El futuro "Plan Maestro Estratégico" o Revista Cuatrienal de Defensa que se publicará este 2010 y del que sale ahora un avance, hará hincapié en que los políticos, agencias de seguridad y contratistas de las fuerzas armadas, se preparen lo antes posible y den prioridad a las necesidades de hacer frente a catástrofes naturales y a guerras para los recursos. (*)
Entre otros temas, el estudio resalta que los militares tendrán que disponer de planes para eventuales incrementos del nivel de los mares, un Océano Ártico libre de hielos y un incremento global de las temperaturas. El estudio sugiere que los planificadores militares han de estar preparados para los efectos nocivos del cambio climático: migraciones forzadas, escasez de recursos y extensión de las enfermedades y epidemias.
Paralelamente, el Plan llama a una mayor independencia de los militares en temas de energía. El Departamento de Defensa recomienda moverse inteligentemente hacía una reducción de la dependencia de combustibles fósiles y desarrollar fuentes renovables de energía. Ya en estos momentos y para algunos servicios, algunas bases militares americanas ya disponen de áreas de paneles solares o células fotovoltáicas (en la foto, un parque de paneles solares) para el suministro eléctrico sin fallos en el caso de fracaso en el abastecimiento de combustible.
El anterior Plan Cuatrienal ya hacía mención de la posibilidad de fallos en el suministro de energía por culpa de actos terroristas, pero no se hacia referencia a las causas del cambio climático, que ahora se ponen en portada. Es lo que los militares americanos llaman la "verdización" (greening) de sus políticas, por su viraje hacía el "verde ecológico", por intereses prácticos más que doctrinarios.
Mientras el Zapatero habla, pero solo habla, de la economía "sostenible", el Sarkozy intenta coordinar una acción global y los americanos se preparan y trabajan.
Coronel Von Rohaut
(*) Ya hace años que muchos economistas y estrategas avisan que las próximas guerras, más que para el petróleo, serán por el agua.
3 comentarios:
El futuro está aquí. Las guerras del agua serán las más terribles.
A buena hora, el problema de fondo no es el calentamiento ni la pronta escasez de agua sino la sobrepoblación; si fueramos menos no habría problema, entre los métodos para reducir el número de la población están las guerras. Suerte.
Evidentemente y yo hace años que lo vengo diciendo, "semos" demasiados. Pero, desafortunadamente, demasiados en los países pobres y tercermundistas.
¿A cuantos nos cargamos?
Publicar un comentario