Pero hoy me lo he comido en una taberna más bien cutre de un barrio tan poco marinero como es Sarriá, en la "Upper Diagonal"... Y con unas ostras para entretenerme mientras me lo preparaban.
Y no de bogavante congelado si no sacado vivo, como las ostras, del acuario a la vista del público, y cocinado en cazuela de fundición...
Y con arroz abundante ya que, siendo la parte más económica del plato, donde así no lo hacen y lo escatiman, demuestran su gilipollez y falta de visión comercial y de respeto hacía la clientela.
Me he puesto como "el Quico".
Coronel Von Rohaut
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