Inventos del "TBO" o la Doctora Franz "Geli" de Copenhague

No ha mucho me lamentaba yo en unos de mis "posts" que nuestros sagaces políticos y administradores, ante un problema, en vez de atajarlo con una solución a veces difícil, o bien niegan su existencia o le dan salida por la vía fácil pero tortuosa, aunque sea perjudicial.

Ponía por ejemplo que si en una calle hay excesivo y ruidoso transito, en lugar de aumentar su capacidad y fluidez, lo que no siempre es fácil, optan por estrecharla aún mas y que los coches, que así no cabrán, se las apañen cómo puedan. Y los ciudadanos que pagan, que se vayan a la mierda y dejen de incordiar...

Si un tipo de árboles, preciosos y procuradores de refrescante sombra, son demasiado frágiles, en lugar de cuidarlos se les tala y se les sustituye por otra mierda de arbolitos. "Mort el gós, acabada la ràbia".

Y ahora, la consejera de salud que si la cara es el espejo del alma ya se ve lo "lista" que debe ser, ante la falta de pediatras y en lugar de aumentar su cantidad (solución a largo plazo) o reciclar médicos de otras especialidades, ha decidido que visiten a los niños las enfermeras...

Claro que ha precisado que sólo para enfermedades livianas, supongo que refiriéndose a resfriados, gripes, "cagarrines", y otras dolencias infantiles, habituales y poco peligrosas. Pero precisamente un pediatra está capacitado para detectar, subyacente a unos síntomas por lo que se lleva un bebé al médico, la posible existencia de otra afección mas grave. Y una enfermera no está ni tiene que estar preparada para éste diagnóstico. Otra vez, dando una solución, no para arreglar un problema si no para sacárselo de encima y si luego el niño "palma", da igual. Ahora ya tenemos sobreproducción, gracias a los inmigrantes...!!!

Donde no hayan pediatras y las enfermeras no alcancen, dice la consejera que se ocuparán de los niños, médicos de familia normales, que no se especializaron en esto.

Una vez me comentó un pediatra que puesto que los niños pequeños no saben expresar con detalle el tipo de su dolencia, los más aptos para diagnosticarles, después de los pediatras, son los veterinarios, ya que los animalitos tampoco saben explicar lo que les ocurre. Brindo la solución a la consejera: así aún seremos mas bestias...

Coronel Von Rohaut