- Punto primero, todo el mundo sabe y sin haberse doctorado en economía en Harvard, que el dinero en "negro" o la contabilidad "B" es precisamente la que no figura en los libros oficiales del partido (ni de las empresas, ni de nada). Encargarle el trabajo a un auditor contable es como hacerse visitar de los pies por un otorrinolaringólogo.
- Punto segundo, ello es como crear una "Comisión de Investigación", que es el eufemismo empleado por todos los partidos para enterrar el cuerpo del delito y que nunca jamás de los jamases se sepa la verdad.
Coronel Von Rohaut
(*) La Operación Malaya, de Marbella, no era un caso de corrupción política, aún que en ambos casos haya políticos de por medio que se han lucrado particularmente, si no que era una actividad puramente mafiosa al cien por cien.
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