Los excelentes gastrónomos de La Vanguardia, el equipo de "5 a taula", pone hoy una frase que debería enmarcarse: "... los jóvenes "chefs" no debieran olvidar que, de vez en cuando, un guiño académico no está nada mal".
Y recuerdan que un buen y sencillo lenguado "à la meunière", con mantequilla que hoy parece proscrita de la cocina, es un manjar divino.
No reniego ni de la "nouvelle cuisine", a pesar que en su nombre se han perpetrado tantas catástrofes y tantos delitos culinarios, ni de los "novísimos chefs" catalanes, que inventan o renuevan platos exquisitos ya que ni la cocina ni nada debe estancarse y no siempre lo pasado fue mejor. Y renovarse o morir.
Pero deberían ir a la cárcel los que, amparados en la búsqueda de lo nuevo por lo nuevo, se ríen del cliente y le toman el pelo, cómo aquel sádico maricón que te sirve una ostra, una, acompañada de un i-pod para que escuches el sonido del mar mientras te la comes, y te cobra un pastón. O la vez que, con mi mujer, fuimos al "Hispania" de Arenys, tan alabado y al que juré no volver jamás. Pedí unos "guisantes de la huerta de la abuela", que estaban realmente deliciosos, pero me sirvieron una triste cucharada en medio de un plato inmenso. Y me lo cobraron. Y me sentí estafado. Y jamás he vuelto.
Y que sea casi imposible encontrar un buen restaurante en donde se pueda paladear alguno de los grandes platos de la "haute cuisine", que no por llevar mantequilla o crema de leche, ni por precisar muchas horas de cocción, ni por llevar salsas complicadas, deberían desaparecer de nuestros placeres cotidianos. Muchos de los platos y de los alimentos que el gran Alejandro Dumas reseñaba en su "Le Grand Dictionnaire de la Cuisine", siguen estando entre lo mejor que jamás se haya podido comer, si alguien los hiciera... ¿ Pero sabrían, todos estos "genios" de ahora, minutar a lo Georges Auguste Escoffier, un plato de alta gastronomía, en lugar de servirte una "esfera de humo con sabor a tripa de sangujüela de los Dardanelos", que no es mas que un invento hecho a máquina ? (*)
Me temo que no.
Coronel Von Rohaut
(*) ¡ Ojo ! Que como "pardillos" o nuevos ricos incultos y pedantes, dispuestos a dejarse enredar en busca de lo más nuevo o diferente, los ha habido siempre, ya en la antigüedad habían cocineros "listillos" que servían, cómo el "no va más" de los placeres gastronómicos, lenguas de pavo real, que es una guarrada que no sabe a nada...
viernes, abril 24, 2009
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