Hay teorías que dicen que las plantas, si se las trata bien (*), crecen y se desarrollan más ufanas y esplendorosas. Creo que nadie se ha atrevido, todavía, a decir que los arboles o los vegetales pueden llegar a tener sentimientos, pero casi. Y que las plantas no puedan tener sentimientos se entiende, pero ello no es óbice para que no pudieran tener sentidos, algo así como un sistema nervioso capaz de captar actividades u ondas que puedan interactuar con ellas y causarles dolor o bien placer.
Mi tía Palmira, hermana de mi madre, tenía un balcón (en un 4º piso donde daba mucho el sol) lleno de macetas con plantas y flores.
Las atendía a diario, con mimo. No solo las regaba y limpiaba con cuidado si no que, mientras tal hacía, les hablaba cariñosamente durante un buen rato...
Posiblemente alguien podrá decir que mi tía, soltera ya mayor, estaba un poco gagá (**) y que lo que hacía era una estupidez. Quizás sí.
¡Pero en mi vida he visto jamás unas flores más lozanas y hermosas que las del balcón de la "tieta Pami"!
Coronel Von Rohaut
(*) Hasta hay quien dice que poniéndoles música, etc.
(**) Mi propia esposa, que no tuvo jamás ningún aprecio personal por las plantas ni menos por su cuidado, y nunca quiso tenerlas en nuestra terraza, se reía bastante de ella (todo y reconocer que sus flores eran esplendidas...)
(PS) Imagen de archivo solo para ilustrar. No tengo ninguna foto del balcón de mi tía, y sus macetas eran de cerámica de Breda, no de plástico...
domingo, marzo 23, 2014
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