Acabo de tener un orgasmo...

El que Cristiano Ronaldo (¿maricón o solo narcisista? Yo diría maricón...) diera una macro-fiesta para celebrar su 30º aniversario, a lo que hasta hace poco todos los periodistas mesetarios excusaban y le daban la razón, incluido el Pedrerol, justo cuando el Real Madrid acababa de ser vencido y humillado por el Atlétic de Simeone que, literalmente, les pasó por encima, está claro (y me encanta) que al Florentino le ha sentado fatal; como una patada en los mismos huevecillos. Lo digo pues hoy, en su programa, el Pedrerol (su correveidile mayor periodístico) ha rectificado y ha sacado la artillería y ha puesto al Ronaldo y su fiestorro hechos unos zorros, a parir. El jefe manda. Y yo me orgasmeo.

Lo que me encantó de la fiesta de nuevo rico (¡qué envidia! por lo de rico, no lo de maricón) es que se bebieran varias cajas de champagne  "Cristal Louis Roederer", un elixir de Reims que hasta el año 1917 no se podía encontrar en el mercado, ni pagando lo que fuera, ya que el Zar de Rusia se quedaba, cada año, la cosecha entera para él y sus amigos...

¿Se creerá el Cristiano que es un nuevo Zar del futbol mundial? Pues, pobre, no puede. Porqué ayer mismo el humilde Messi, en el Campo del Bilbao, le enseñó qué es jugar a futbol... Y no solo correr mucho y marcar, bien, muchos goles, que es lo que hace el Cristiano. Si no llevar todo el equipo a cuestas e iniciar y a veces terminar, todas las jugadas que previamente se ha inventado. Hacer futbol. Magia, calidad y eficacia, todo junto. Otra vez, excelso.

Coronel Von Rohaut